ASOCIACIÓN DE AMISTAD CON EL
PUEBLO SAHARAUI DE SEVILLA
30 de Mayo de 2015 , 12 h.
El próximo sábado, día 30 de mayo de 2015, a las 12 h., convocamos una concentración en Las Setas, para apoyar las demandas de la madre saharaui Takbar Haddi, que ese día llevará 16 días en huelga de hambre frente al consulado marroquí en Las Palmas de Gran Canaria.
Takbar Haddi perdió a su hijo el pasado 8 de febrero tras ser agredido por colonos marroquíes y una larga concatenación de negligencias médicas y torturas policiales. Pese a haber denunciado la situación frente al Ministerio de Justicia del Aaiún y al procurador del rey de la misma ciudad, asegura no haber obtenido más que un absoluto silencio institucional.
El estado de salud de Takbar se deteriora rápidamente, y entre todas y todos tenemos que conseguir que el Gobierno marroquí de una respuesta a las peticiones de Takbar ante tan espantoso crimen y que Takbar no pierda irreversiblemente su salud o muera.
#JusticiaparaHaidala
Acude con tu gente, por la justicia y los derechos humanos.
Takbar necesita nuestro apoyo “Soy Takbar Haddi y el pasado 15 de Mayo, comencé una huelga de hambre INDEFINIDA fuera del consulado marroquí en Las Palmas de Gran Canarias por el asesinato de mi hijo Mohamed Lamine Haidala de 21 años por colonos marroquíes, con el respaldo de las autoridades de ocupación y la negligencia médica intencionada.
Después del asesinato de mi hijo, me trasladé al Aaiún para conocer los hechos de primera mano. Al conocer la magnitud de la injusticia de las circunstancias de su asesinato y muerte, decidí investigar y esclarecer los hechos hasta las últimas consecuencias: me dirigí al Ministro de Justicia y al Procurador General del Rey en El Aaiún sin obtener ninguna respuesta, y luego volví a escribir al mismo Procurador solicitando información sobre el destino de las denuncias y reivindicaciones.
Por respuesta no obtuve más que el refuerzo del asedio policial y los asaltos a la casa de mi familia y las calles que llevan a ella, con lo que conllevó de torturas dentro de la casa y destrucción de bienes. Todo esto por no doblegarnos ante el diluvio de presiones y ostentosos sobornos (90.000 euros) a cambio de firmar el entierro de nuestro hijo en silencio y abstenernos de cualquier demanda de autopsia, investigación u otra.”